REINA Y PERRA

Entré a su habitación desnudo, cogí su cabeza con una mano y la empuje hacia mi parte mas íntima. Ella en cuatro, y yo intercambiaba miradas a su boca y a sus nalgas en el espejo. Me toco a mi ir por detrás, primero con la lengua y después con mi órgano más duro. Lo hicimos en la cama, sobre el banco de su precioso pisno, de pié cogiebdala en peso...
Terminó gritando y dejando todo mojado, pero quería mas y la noche no quedó ahí. En fin.. esa noche viene a mi mente una y otra vez. Se repetirá, con latigazos y algo más de ruido, pronto.



No hay comentarios:

Publicar un comentario